Principios de los Derechos humanos

Los principios de los derechos humanos son aquellas categorías que las personas deben tomar en cuenta para la creación, aplicación y promoción de los derechos humanos.

La palabra principio proviene del latín principium, que significa comienzo, y a su vez la palabra pricipium deriva de prim que significa primero y cap que significa tomar, es decir la conjunción significa lo que se toma en primer lugar. En derecho los principios son un conjunto de normas, valores, conductas que se deben de tomar en cuenta para la aplicación del derecho.

Las naciones a través de varios instrumentos filosóficos jurídicos han desarrollado y adoptado como verdaderos como principios de los derechos humanos los de universalidad, interdependencia, indivisibilidad y progresividad.

Principio de Universalidad

El principio de universalidad consiste en que los DDHH corresponden a todas las personas sin distinción de raza, credo, nacionalidad, edad, preferencia sexual o cualquier condición que particularice a una persona, se basa en la idea de que todos los seres humanos tienen un valor intrínseco y una dignidad inherente que merece ser reconocida y protegida. Dicho principio tiene que ver con una de las características de igualdad y no discriminación, sin embargo, en ocasiones específicas se deben analizar los casos concretos para determinar la correcta aplicación del principio de universalidad.

Asimismo, este principio sostiene que todos los individuos poseen una serie de derechos fundamentales que deben ser reconocidos, respetados, protegidos y garantizados por toda la comunidad internacional. De hecho la universalidad de los derechos humanos está consagrada en la Declaración Universal de Derechos Humanos adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1948, así como en numerosos tratados internacionales y constituciones nacionales de diversos países.

Principio de Interdependencia

El principio de interdependencia consiste en que los Derechos Humanos se encuentran vinculado entre ellos. El principio de interdependencia señala que si un derecho es reconocido, es obligatorio reconocer todos ya que están conectados unos a otros.

El principio señala que los derechos humanos deben comprenderse como un conjunto, ya sean derechos civiles, políticos, económicos o cualquier otro tipo. Con la aplicación de la interdependencia se garantiza que se apliquen los derechos como una universalidad para lograr que el goce y ejercicio sea de manera integral. Además existe una conexión inherente entre ellos, y la violación o limitación de un derecho puede tener un impacto negativo en la realización de otros derechos.

Por ejemplo, el derecho a la educación puede estar relacionado con el derecho a la igualdad y no discriminación. Si se niega el acceso a la educación a ciertos grupos de personas, se está perpetuando la discriminación y limitando su capacidad de disfrutar de otros derechos, como el derecho al trabajo o la participación política.

La interdependencia de los derechos humanos también significa que los Estados y la comunidad internacional deben abordar los derechos humanos de manera integral. No se pueden seleccionar ciertos derechos mientras se ignoran otros. Es necesario promover y proteger todos los derechos de manera equitativa y garantizar que su realización sea coherente y complementaria.

Principio de Indivisibilidad

El principio de indivisibilidad consiste en que los derechos humanos no se pueden dividir para su aplicación, protección o promoción de los Derechos Humanos. No se puede decir que tienes 45% de libertad de expresión, por lo que el derecho humano protegido se da por completo o no se da.

Bajo este principio, los derechos humanos se entienden como un conjunto coherente e integral. No se pueden seleccionar o priorizar algunos derechos sobre otros, ni se pueden sacrificar ciertos derechos en beneficio de otros. Todos los derechos tienen un valor igual y deben ser respetados, protegidos y garantizados en su totalidad.

Cada derecho humano se debe aplicar en su totalidad con una interpretación pro persona, siempre buscando la mejor protección y el mayor alcance posible.

Principio de Progresividad

El principio de progresividad consiste en que los derechos humanos son escalonados sin aceptar retrocesos, es decir que cada vez que se reconozca un derecho humano tendrá que garantizarse su promoción y aplicación, lo cual implica el gradual progreso y la obligación de los estados para que los ciudadanos disfruten de los niveles de derechos humanos logrados.

Este principio se basa en el reconocimiento de que los derechos humanos son universalmente válidos y que su plena realización puede requerir un proceso gradual debido a las limitaciones económicas, sociales, políticas y culturales de cada país.

La progresividad implica que los Estados deben tomar medidas activas para mejorar la situación de los derechos humanos a lo largo del tiempo. Esto implica la adopción de políticas, leyes y programas que promuevan la igualdad, la no discriminación y el pleno goce de los derechos. Los Estados también deben asignar recursos adecuados para implementar y garantizar los derechos humanos.

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